Por Nicole Ki
La chocante victoria de Donald Trump en la elección presidencial de Wisconsin, tiene a muchos estresados en Madison acerca del futuro, y luchando para entender qué pasó. Por décadas un fortín Democrático, Wisconsin no había sido Republicano desde 1984, y las encuestas de la Universidad de Marquette constantemente mostraban a Clinton acabando con Trump a través de la campana, con sólidos 6 puntos arriba, cerca del día de elección. Apenas comenzamos a analizar los datos de la votación, una historia emerge de un candidato que fue capaz de capturar una abrumadora mayoría de votantes blancos, y en particular de la clase trabajadora, aquellos con menos educación, y sorpresivamente mujeres, en una elección con muy bajos niveles de votación entre la población en general.
Frustrados votantes por Clinton, y defensivos votantes por Trump, han estado discutiendo en los medios sociales, retirándose la amistad en Facebook, y demostrando una alarmante división a través de la nación, y en nuestro estado más que nunca. Aquellos que están infelices con la elección están preguntando:
“Qué salió mal?”
“La Silenciosa Mayoría”
Analistas políticos están acreditando la victoria de Trump en su habilidad para capturar a “La Mayoría Silenciosa,” un término utilizado por Richard Nixon, el presidente de los Estados Unidos que fue culpado por el escándalo de corrupción del Watergate, para describir un segmento del público Norteamericano, que no participa en manifestaciones, o se hace oír de otra manera, pero aparecen a votar. En 2016, “La Silenciosa Mayoría” resultó siendo la clase blanca trabajadora viviendo en el “Rust Belt” del Medio Oeste, los estados de los Grandes Lagos donde las fábricas alguna vez proveyeron trabajos bien pagados, pero se han ido ahora a la bancarrota, o partido para otros países — tomando sus trabajos con ellas. Aquí es exactamente donde Trump ganó estados que siempre habían ido con los Demócratas: Michigan, Wisconsin, Indiana, Ohio y Pennsylvania. Trump también ganó el apoyo de otra gente blanca trabajadora como los mineros de carbón y cultivadores, y otros en decisivas áreas rurales “estados de batalla” como Iowa, North Carolina, Florida y Nevada.
Educación y Género
Otro factor importante en la elección de 2016 fue educación. Mientras 58% de toda la gente blanca votante eligieron a Trump, el candidato capturado a un sorpresivo 72% de los que no tienen educación universitaria, comparado con el 23% de Clinton. De acuerdo al Washington Post’s Charles Comosy, “ los graduados de universidad están formados por una cultura de campus que les deja desabilitados para entender a personas con posiciones desconocidas o heterodoxas acerca de armas, aborto, religión, matrimonio, género y privilegios.” Esta distinción en argumentos alimentados de perspectivas, impulse argumentos entre los seguidores de Clinton y Trump durante las campañas, y además muestra la división entre los votantes de Wisconsin y de la nación en esta elección.
A Trump también le fue bien con las mujeres. A pesar de sus controversiales afirmaciones durante la campaña que muchos encontraron insultantes y degradantes para las mujeres, además de sus afirmaciones pasadas acerca de “tomar mujeres” que muchos dijeron fueron predatorios, y su soporte a encadenar mujeres que tienen abortos, una encuesta de BBC mostró que 53% de las mujeres blancas favorecieron a Trump, mientras solo 43% apoyaron a Clinton. Y aquí la brecha educativa una vez más aparece, con 62% de no graduadas de universidad apoyando a Trump, comparado con 34% apoyando a Clinton; entre las mujeres con grados universitarios solo 45% apoyaron a Trump.
Sentimientos contra el Establecimiento
Los problemas de Clinton con acusaciones de escándalos y corrupción también jugaron un factor decisivo en la elección. La continua investigación de emails del FBI , por lo que Clinton la apodo “Crooked Hillary,” (Hillary Comprendida) parece haber contribuido al éxito de Trump, cuando dos semanas antes de la elección, el director del FBI James Comey anunció que iba a revisar entre nuevos emails encontrados, y aunque Comey después declare que el FBI no había encontrado nada más mal, muchos votantes citaron el escándalo Clinton de los emails y la desconfianza que les produce ella como razón para votar por Trump.
Como resultado muchos votaron por Trump porque él no representa al político típico. En la década pasada muchos ciudadanos Americanos citaron una creciente desconfianza en la capacidad del gobierno para trabajar con cohesividad y lograr objetivos, al igual que una desconfianza en los políticos para hacer los cambios acerca de los cuales sus respectivos estados están preocupados. Trump con su abierta y controversial retórica, representa la antítesis del político pícaro, y muchos consideran su lenguaje ofensivo como una cualidad que atrajo votantes hacia el.
Baja participación de votantes en Wisconsin
Otro importante factor fue la baja participación de votantes. De acuerdo con CNN, la participación de votantes en 2016 fue la más baja desde hace 20 años, cayendo al 55% este año, comparado con el 64% en 2008, y 60% en 2012. Y aunque el resultado de votantes en la UW Madison estuvo arriba por 2,000 este año, la tendencia hacia una baja de votantes fue real en general también para el estado de Wisconsin. De acuerdo con el Capital Times, mientras Wisconsin tuvo el segundo más alto resultado comparado con otros estados en el 2008 y 2012, la participación de votantes en el estado bajó por cuatro puntos este año, desde el resultado de 2012. Y en Milwaukee, una fortaleza de votantes Latinos y Negros, y más votantes Liberales de todas las etnias, el resultado general de votantes estuvo 15% abajo.
Interesantemente, Latinos en Wisconsin desafío las tendencias nacionales, con votantes que se auto identificaron como Latino/Hispanos resultando en números récord de hasta 78% en Milwaukee, superando el promedio general de votos de 55% en Wisconsin. Y mientras a lo largo de la nación Trump aseguró el 29% del Latinx voto –de hecho ganando más Latinos que el 27% de Romney en 2012—de acuerdo con “exit poll” análisis (encuestas de votantes después de votar el dia de la elección) por la organización de investigación Latino Decisions, los Latinos de Wisconsin votaron la semana pasada en una proporción tan alta como el 90% por Clinton —estruendosamente resultando contra Trump. Al final sin embargo, los esfuerzos de los Latinos para mantener a Trump fuera de la presidencia no fueron suficientes para contrabalancear el resultado de los disgustados votantes blancos de Wisconsin.
Avanzando, mientras los votantes por Trump están felices con el resultado de la elección, los apoyantes de Clinton están disgustados, protagonizando gigantescas protestas alrededor de la nación. Protestas en California y Portland han sido tensas, impulsadas por incidentes racistas pasando en campus universitarios, como el de la Universidad de Villanova y la Universidad de Pensilvania contra estudiantes negros.
Mucha gente ha estado inclusive considerando moverse para Canadá, mientras otros están citando el mensaje “#Calexit” — una versión Californiana del mensaje #Brexit usado por los Británicos para expresar su deseo de dejar la Unión Europea.
Muchos creen que esta elección ha expuesto una Mayoría Silenciosa compuesta por una población olvidada de la clase trabajadora, y otros votantes que ven el “Sueño Americano” desintegrándose, y a mostrado una luz en las serias divisiones entre la gente de este país. Aunque el futuro es incierto bajo la presidencia de Trump, muchos políticos democráticos oficiales tienen esperanza y están dispuestos a trabajar con el para representar a las preocupaciones de los votantes por Clinton.