Por Gladys Viscarra
Rosalía Gittens Escudero nació en Panamá y tiene un máster en educación bilingüe. En el caso de ella, español e inglés. Pero el bilingüismo es un aprendizaje, tiene avances, retrocesos y también chascarros.
Por ejemplo, durante una presentación en la universidad, “me sentía muy nerviosa ya que era la primera vez que utilizaba inglés académico en frente de grupo grandes de personas”. Rosalía narra que inició tartamudeando varias veces. Podía sentir como le temblaban las piernas, pero de pronto se armó de valor, ganó confianza y el nerviosismo se desvaneció.
“El problema fue —dice con gracia Gittens— es note que el profesor y las personas en la audiencia se notaban confundidas. Mientras explicaba mi tema podía ver como sus ojos se ponían cada vez más grandes, y movían sus cuerpos hacia adelante, como cuando tratas de leer letras pequeñitas en un anuncio. Lo primero que pensé fue “¡mi acento es tan marcado que nadie me entiende!”.
Cuando finalizó, todos aplaudieron y el profesor inmediatamente le dijo ‘perfecto pero ahora por favor dilo todo en inglés…’ Al parecer sin darse cuenta Rosalía arrancó en inglés y en algún momento cambió a español. “¡No lo había notado! El profesor me dijo que me veía tan emocionada y segura de sí misma, que decidió escucharme en español. De esa manera podría calificar mi presentación como era debido”.
Me dijo: ‘quería que todos [en el salón] experimentáramos lo que se siente aprender en un segundo idioma. ¡La oportunidad fue perfecta! Nos reímos mucho y no sirvió como actividad para romper el hielo y abrir la ventana para más conversaciones sobre aprendizajes en clase.
Rosalía es hija de Rosa Elvira y Víctor Julio y en la nación del Canal estudió un bachillerato en Ciencias y tomó varias clases universitarias en el área de Negocios y Finanzas. El año 2004 vino a Estados Unidos para participar en un programa de intercambio cultural y aprender inglés. Retornó a Panamá en el 2006 con la inquietud de volver. Finalmente el año 2007 regresó como alumna en el Edgewood College con el objetivo de completar su licenciatura. Luego prosiguió con una maestría y en la actualidad está en proceso de completar los requisitos para obtener licencia de enseñanza de inglés como segundo idioma (ESL).
Cree en la perseverancia como llave para salir adelante, por eso detesta “la negatividad y el egoísmo. Le gusta el cine independiente “aunque solo voy como dos veces al año”. Le gusta bailar, “pero no soy una experta pero trato y tengo nociones de como tocar el piano” y en estos días se encuentra leyendo varios libros al mismo tiempo, “Malinche” de Laura Esquivel, sobre una mujer indígena que cuando conoce a Hernán Cortés, asume que se trata del propio dios Quetzalcóatl que regresa a liberar a su pueblo. También “We Should All be Feminist” de una nigeriana genial, Chimamanda Ngozi Adichie y “You are the Answer” de Michael JTamura. Le gusta el arroz con pollo de su hermana y el “shepherd’s pie” que prepara su esposo.
¿Cómo aplicas las herramientas aprendidas para enseñar inglés?
En mi posición como maestra de ESL para el Distrito Escolar Metropolitano de Madison tengo la oportunidad de trabajar con la comunidad latina, y uno de mis enfoques es incluir a los padres latinos en el aprendizaje de sus hijos y conectarlos con recursos dentro del Distrito Escolar y en la comunidad. Eso tiene buenos resultados en el aprendizaje.
¿Qué es lo que gratifica más de enseñar inglés?
Lo más gratificante de mi trabajo es el poder hacer la diferencia en las vidas de mis estudiantes.
Pero la vida de Rosalía no ha sido fácil. En un periodo de siete años tuvo que superar el fallecimiento de sus padres, dos hermanos y su abuela.
Tan solo tenía 10 años cuando mi madre falleció y 12 cuando mi padre falleció, así que me toco madurar y enfrentar la realidad a muy temprana edad. Cuando murió mi madre fue uno de los días más tristes. Ella falleció a los 34 años de lupus, muy joven y éramos muy unidas. La verdad yo estaba muy pequeña y no estaba preparada para tan grande adversidad.
¿Qué aprendiste de la experiencia de perder a los padres y luego continuar buscando tu destino sin ellos?
No sé si uno puede extrapolar situaciones, pero en mi caso no ha sido nada fácil. Por ejemplo, me tocó enfrentar el racismo, también maltrato físico y mental, la pobreza. El acceso a recursos siempre fue limitado para mí. Pero nunca me doy por vencida, trato de mantener una actitud positiva y luchar por educarme y mejorar mi calidad de vida.
¿Cuáles son tus grandes sueños?
Afortunadamente he logrado realizar dos de mis más grandes sueños: primero ir a la universidad y luego aprender un segundo idioma. He conseguido las dos cosas. ahora tengo un sueño que quisiera hacer realidad, que es disminuir el nivel de desigualdad y pobreza en el que viven muchos niños en Estados Unidos.
No llegaste hace mucho y ya eres maestra ¿te facilitó ese proceso el participar en actividades voluntarias?
Claro que sí, por ejemplo he tenido la oportunidad de hacer trabajos voluntarios para varias organizaciones incluyendo la Susan G. Komen for the Cure, el Centro Hispano, Centro Guadalupe, la Fundación Internacional de Capoeira Angola, la Boys & Girls Club, el MSCR, UW Madison, Escuela Comunitaria Nuestro Mundo, Fundación Americana de Lupus, St.Vincent de Paul food pantry, Luke House, entre otras.
¿El ser voluntario te hace sentir feliz?
No se sí feliz, pero si me hace sentir a gusto tener los pies sobre la tierra, estar saludable y poder disfrutar la vida con mis seres queridos. Por ejemplo admiro mucho a mi hermana Virginia. Ella es muy fuerte, emprendedora y honesta. No le da miedo expresar sus sentimientos y tomar nuevos retos. Además, es súper organizada y ¡puntual!
¿Qué características buenas te has encontrado en la gente con la que te relacionas?
Yo he encontrado que las personas tienen empatía; Paciencia y tercero, capacidad para adaptarse, lo que en inglés se conoce como “resilience”. Por ejemplo mis amigas y tías que además son mujeres fuertes, trabajadoras y capaces. Mientras, estoy tratando de disfrutar el presente y planear poco a poco. Pero me encantaría viajar por todo el mundo, seguir un doctorado, y crear más oportunidades de educación para la población latina.