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Según la prensa local, los investigadores de la UW-Madison utilizan un aceite proveniente de una glándula en la cola de los pollos para mejorar la supervivencia en las granjas de peces. El descubrimiento podría tener implicaciones globales para la industria del salmón del Atlántico.
Mientras estudia usos potenciales de partes de pollos que, usualmente, son desechadas por los procesadores, el profesor de ciencia animal de la UW-Madison, Mark Cook, descubrió que la glándula uropígea de un pollo, ubicada en la parte superior de la base de la cola, excretaba un aceite que exhibía propiedades antiinflamatorias.
En investigaciones anteriores, Cook halló que otro compuesto antiinflamatorio aumentó el crecimiento de los peces. Así que se puso en contacto con el científico senior de la UW-Madison Terence Barry, un experto en acuicultura.
Barry dijo que ambos, junto con un candidato post-doctoral llamado Jake Olson, hicieron una prueba sencilla usando peces de cabeza gorda y notaron el crecimiento acelerado. Entonces, plantearon la hipótesis de que el aceite, con sus propiedades antiinflamatorias, permitió que los peces enfocaran la energía que, normalmente, gastan en luchar contra infecciones y parásitos en el desarrollo de su tripa.
Sin embargo, otras pruebas con perca y trucha arco iris no produjeron resultados similares y los investigadores se quedaron perplejos. Barry afirmó que un accidente en el laboratorio resultó en otro descubrimiento. Por casualidad, hubo una oscilación de temperatura en uno de los tanques que contenía dos grupos de peces, los que fueron tratados con aceite de la glándula uropígea y los que no lo fueron. La supervivencia de los peces parecía mejorar cuando consumían el aceite.
“Durante el experimento, todos los peces que recibieron el aceite sobrevivieron y muchos, o la mayoría de los peces, en los tratamientos de control murieron y eso sucedió con diferentes factores de estrés en diferentes experimentos”, dijo Barry.
Por lo tanto, en un extraño giro del destino el aceite de una glándula en la cola de un pollo ayuda a los peces que se cultivan a crecer más rápido y a tener mejores posibilidades de supervivencia en situaciones de estrés.
Barry y sus compañeros investigadores están llamando al aceite cosajaba, denominación que ha sido patentada. Además, señaló que podría tener implicaciones globales para la industria multimillonaria del salmón del Atlántico, que pierde cientos de millones de dólares durante momentos estresantes, como el movimiento entre tanques, la vacunación, o la transición de agua dulce a salada.