Un mes de actividades especiales del sitio protagonista de la diversión y la política progresista de Madison.
Por Rafael Viscarra.
– El pasado 6 de diciembre el Cardinal Bar cumplió 40 años de funcionamiento en la ciudad de Madison. En estas cuatro décadasa realizado una cartelera cultural que ha enriquecido la vida social y cultural de la capital de Wisconsin.
Aunque todo el mes de diciembre está dedicado a la celebración, durante un mes se han realizado actividades especiales. El evento central fué en el local de la calle 418 E. Wilson. Una gran fiesta bailable en que previamente Ricardo González, propietario del establecimiento, luego de dirigir un brindis para los invitados presentó un video documental sobre la historia de Cardinal Bar.
Dijo González: “Yo me siento muy orgulloso de cumplir 40 años con Cardinal Bar de Madison. De hecho, nosotros somos el club de baile, la discoteca que ha durado más tiempo en toda la historia de Estados Unidos. Que yo sepa ningún otro salón de baile o discoteca ha durado 40 años bajo el mismo dueño y haciendo lo mismo”.
Cardinal Bar es un referente de entretención y música en el área de los cuatro lagos. A las tradicionales fiestas de salsa y merengue, Cardinal ha dado espacio a casi todo movimiento musical: noches de punk, noches fetiche, jornadas smoking, eventos para cada talento y estilo. González puede presumir de ser amigo tanto de miembros de la elite académica y política de la ciudad; cómo de los más recientes migrantes.
Decenas de anécdotas han ayudado a la celebridad del lugar. En los 70s tuvo a un alcalde como DJ invitado, sobrevivió a un incendio, ha sido espacio para cobijar decenas de iniciativas ciudadanas.
“Este lugar continúa tan vibrante como lo fue hace 40 años”, indicó González, “Eso me da mucho placer y es parte de una historia muy bonita; porque por aquí ha pasado tanta gente, hasta la tercera generación de madisonianos. Esta juventud que asiste hoy, sus abuelos se conocieron aquí, se enamoraron aquí y se casaron, ahora son ellos, los nietos los que vienen a bailar al Cardinal, o sea, los que tienen 19 a 20 años de edad”.
En este evento de celebración estuvieron presentes invitados especiales de diferentes nacionalidades, entre ellos cubanos, colombianos, puertorriqueños, bolivianos, mexicanos, afroamericanos, estadounidenses y de otros países europeos.
Bertha Armacanqui, nacida en Perú y conocida activista en Madison señaló: “A Ricardo le envió un saludo muy grande por cumplir 40 años de apertura de Cardinal Bar. Es un lugar que se ha convertido en el centro de los latinoamericanos y de todas las nacionalidades de habla hispana; así como de otras nacionalidades que hablan otros idiomas. El Cardinal unifica a toda la población de diferentes grupos o comunidades. Ojala que Cardinal Bar continúe con sus puertas abiertas para el público que ama el buen ambiente para divertirse por otros cuarenta años más”.
Por su parte María Victoria Barbosa, residente casi una década en la ciudad señaló: “Generalmente vengo muchísimo albar de Ricardo González, por eso quiero felicitarle por su cuarenta aniversario. Se dice fácil pero no es nada fácil mantener el prestigio de un lugar, sostener un status tan alto, donde nos sentimos contentos y bien atendidos. Es un sitio de privilegio para la comunidad latina, nos sentimos apoyados. Gracias Ricardo por tener este lugar tan hermoso para nosotros, felicitaciones y que continúe siendo tan exitoso como siempre”.
De igual modo Joan Hoyer, parroquiana fiel opinó: “Soy de Madison, vengo aquí desde que se abrió el Cardinal Bar hace 40 años, yo en ese entonces tenía 27 años, ahora tengo 67. Es un lugar increíble y confortable para pasar un fin semana excelente. Felicitaciones a Ricardo y a Cardinal Bar.”
Susana González, la hermana de González también presente esa noche agregó “Como hermana me parece requeté bien que Cardinal Bar haya cumplido 40 años. Yo vengo aquí a disfrutar de la vida con mis amigas, no obstante mis setentas, sigo viniendo a bailar hasta ahora”.
González nació en Cuba y dejó el país con su familia en 1960, estudió en la universidad de Oklahoma y llegó a Wisconsin en 1968 como jefe de personal Green Giant en Ripon, condado de Fond du Lac.
En 1972 se había involucrado en el activismo progresista y había hecho algunos amigos en los círculos gubernamentales demócratas en el tiempo del gobernador Pat Lucey. González entró a trabajar al ejecutivo estatal como oficial de acción afirmativa del Estado.
Fue en ese tiempo que vio un anuncio de “Oportunidades de Negocios” en el State Journal sobre la venta de una taberna con vista al lago Monona, con “decoración circa 1912”. El 6 de diciembre de 1974 abrió el bar en un casi abandonado Cardinal Hotel.
González pensó orientarlo a un bar gay, pero el Cardinal nunca ha sido sólo una cosa. Gays empezaron a traer a sus amigos heterosexuales. González encontró algo de espacio de baile, y pronto el Cardinal era un bar y una discoteca.
Ricardo, en estos 40 años ¿Cómo ha evolucionado la música del Cardinal?
“Empezamos con música disco, pero siempre hubo música latina desde su inicio. Poco a poco la música latina fue aumentando hasta que tuvimos una noche sólo de música Latina. Ahora la presencia de música latina muy fuerte, tanto como música de discoteca, como de música en vivo. Y no solo de salsa y merengue sino otros géneros latinos como flamenco, tango, afroamericana, afrocubana, la salsa boricua, la salda colombiana y otros géneros”.
¿Cuantos años más al frente de Cardinal Bar?
“Eso solo sabe Dios. Mientras me sienta con energía y me sienta contento seguiré al frente de Cardinal Bar”.
¿Qué gustarías decirle a los seguidores del Cardinal?
“Simplemente gracias a todos por su apoyo a través de los años y por haber creído en mí. Juntos hemos reinventado este lugar de entretenimiento decente y multicultural donde todos son bien venidos ahora y siempre”, concluyó Ricardo González.