Por Pablo Tonini (Notimex).
El crucero estadunidense Adonia, el primero en visitar Cuba en medio siglo, arribó el 8 de mayo pasado en su viaje de retorno al Puerto de Miami con cientos de pasajeros cansados, pero felices tras una semana de visita por la isla.
El buque de la compañía Fathom (filial de la empresa Carnival) atracó en el Puerto de Miami con poco más de 700 pasajeros.
Uno de esos pasajeros Celia Mena, una cubanoestadunidense que salió de la isla con sus padres en 1961 cuando era niña, describió el viaje de una semana por Cuba como “una experiencia increíble”.
“Lo mejor fue la llegada a La Habana cuando fuimos bienvenidos como estrellas. Había cientos de personas esperándonos y cuando salimos del barco todo el mundo nos daba la mano y nos decía gracias por venir”, dijo Mena.
“Lo peor es ver que en Cuba los cubanos pasan trabajo y tienen muchas necesidades y cosas que les hacen falta”, señaló la mujer originaria de Camagüey y residente de Palm Beach Gardens, en el sur de Florida.
Autoridades de Carnival confirmaron que al menos media docena de cubanoestadunidenses viajaron en el histórico crucero que visitó La Habana y las provincias de Cienfuegos y Santiago de Cuba durante ocho días.
Los cruceros tuvieron que superar obstáculos como un decreto aprobado poco después de la Revolución Cubana de 1959 que prohibía a los cubanos entrar o salir de la isla por vía marítima.
Al principio Carnival optó por no vender boletos a los cubanoestadunidenses, pero tras las protestas del exilio cubano, que tildaba de discriminatoria la medida, la compañía insistió ante La Habana para derogar la medida, la cual el gobierno cubano desechó.
“Fue un viaje maravilloso que volvería a hacer en unos cuatro años para ver qué tanto ha avanzado el pueblo cubano”, expresó por su parte Lou Ann Carson, una estadunidense del sur de Florida, quien viajó junto a su esposo.
“Fueron siete días desde que salimos aquí a flor de piel la emoción y ver a los cubanoestadunidenses abrazarse, fue algo que me sacó las lágrimas”, dijo a su vez Tony Dandrades, periodista dominicano de la televisora Univisión, quien realizó el viaje.
“Es un pueblo que está tratando de salir de una crisis que lleva muchos años, por supuesto los tours te llevaban a lugares turísticos, pero si te metes por las calles donde no está programado el paseo vas a encontrar situaciones complicadas”, agregó.
Patricia Weg, una peruana de Nueva Jersey, mencionó que “El viaje fue espectacular y la comida de lo mejor. Los cubanos quieren un cambio, pero tienen que empezar despacito, no los podemos atarantar así tan rápido porque todavía no están listos”, comentó.
La apertura de cruceros para navegar de Estados Unidos a Cuba surgió luego del anuncio, en diciembre de 2014, de que los dos viejos enemigos de la “Guerra Fría” restablecieron las relaciones diplomáticas que se rompieron en 1961.
Ambas embajadas, tanto en Washington, como en La Habana, han vuelto a abrir y el viaje del buque Adonia es un signo de cómo poco a poco han ido avanzando las relaciones entre ambas naciones. Se espera que Adonia realice un promedio de 26 viajes por
año a la isla.