Por Rafael Viscarra
Después de que el ritmo de contagios de Covid-19 disminuya considerablemente y las personas empiecen a retomar sus actividades en Estados Unidos, uno de los asuntos más importantes será el relacionado con la educación de la población más joven del país y cómo cambiarán las dinámicas al interior del salón de clases.
Según un plan de gobierno federal para la reapertura de las actividades hecho público por The Washington Post, llevar a los niños de vuelta a las aulas es una de las tareas prioritarias para volver a la normalidad. Pero la pregunta del millón es: ¿Es seguro y saludable para mis hijos(as) llevarlos a clases?
A pesar de la zozobra que generará en los padres el regreso de sus hijos a las instituciones educativas, los cambios serán evidentes en temas como las medidas de salud y de higiene. Todas las medidas higiénicas para combatir el coronavirus como el lavado frecuente de manos, la desinfección frecuente de los objetos y el distanciamiento social serán fundamentales.
En el caso de Nueva York, de acuerdo con el tamaño de las aulas se podría acomodar a 12 niños como máximo para mantener una sana distancia social entre los alumnos dentro de un salón, ante el hecho de que todavía no existe una cura o vacuna.
Si bien es cierto que entre los ninos COVID-19 ha sido poco frecuente en EE.UU. ellos no son los únicos ocupantes del espacio, de igual forma se debe considerar a los maestros y personal de apoyo escolar. Una medida podría ser que los estudiantes podrían estar con un solo maestro durante la mayoría del tiempo para evitar contagio a más personas.
Una propuesta que también ha surgido es la de modificar los horarios o días de clase en turnos de mañana y tarde, unos ninos asistan lunes, miércoles y viernes de una semana y para el siguiente grupo solo los martes y jueves.
Los estudiantes de mayores de edad respecto a las Universidades deberán asistir a las universidades que se ubican en los principales centros urbanos y no fuera, para evitarse complicaciones de salud y económica.
No habrá actividades deportivas ni reuniones grupales en las escuelas y las universidades y tal vez ni siquiera conferencias de padres y maestros.
Pero ojo aun no existe nada oficial respecto a los posibles cambios en la educación después del coronavirus.
La situación para los alumnos de los Estados Unidos (y del mundo) podría resumirse en las palabras que el doctor de la Casa Blanca, Anthony Fauci, pronunció en una oportunidad: “Si un regreso a la normalidad significa actuar como si nunca hubiera existido una pandemia de coronavirus, no creo que eso vaya a suceder”.